Aunque parezca una historia interminable (o cuando menos muy difícil de concluir por las posturas encastilladas de las partes), la reforma laboral francesa sigue dando que hablar. Hoy mismo, al hilo de la votación que tendrá lugar a partir de las 18.00 en el Senado, los siete sindicatos de trabajadores y estudiantes han vuelto a convocar otra jornada de movilización, la 11ª a nivel estatal desde que el Gobierno presentara en marzo el proyecto de ley.

La organización de la manifestación de la capital parisina ha estado otra vez sobre la mesa pero sin la tensión de la del pasado 23 que fue primero prohibida por el Ministerio de Interior aunque finalmente pudo desarrollarse bajo unas condiciones muy estrictas y con un operativo de seguridad policial impresionante. El lunes los representantes sindicales y los de la Prefectura llegaron a un acuerdo sobre el trayecto, que reclamaban fuese más largo que el de la semana pasada, y sobre los dispositivos de seguridad.

Así, la manifestación partirá a las 14.00 de la plaza de La Bastilla para finalizar en la de Italia.

El clima se degrada

Aunque el número de participantes en las movilizaciones está a la baja, la tensión sobre esta problemática no decae. El clima se está degradando ya no solo entre el Gobierno y los sindicatos y movimientos sociales contrarios a la reforma. El presidente Hollande sigue afirmando que no cederá y se niega a recibir a los sindicatos; en las movilizaciones se están denunciando cada vez más casos de violencia policial y, además, el ambiente se ha enrarecido con los ataques a las sedes sindicales. Primero fue la de la CFDT el jueves y dos días después la sede central de la CGT. El propio secretario general de este sindicato, Philippe Martinez, ha reconocido que hay «un clima malsano».

Aparte de la manifestación, los sindicatos entregarán hoy en el Palacio del Elíseo los resultados de la votación ciudadana que iniciaron hace un mes en los centros de trabajo. Desde entonces han recogido las respuestas de cientos de miles de personas en torno a dos preguntas: “Retirada del proyecto de la ley sobre el trabajo: A favor/En contra” y “Cree que hoy en día hacen falta nuevos derechos para los trabajadores, los jóvenes, los parados y jubilados Si/No”. Esperan que la iniciativa sensibilizará a Hollande sobre la oposición que concita la reforma.

Erretiratu Arte kolektiboak «poliziaren indarkeria» salatu du

Lan erreforma bertan behera uztea exijitzen duen Erretiratu Arte Ipar Euskal Herriko kolektiboak ekainaren 23an Baionako suprefetura aitzinean «era baketsuan» egin zuen «desobedientzia ekintzaren» inguruan suertatutakoaz bere bertsioa eman zuen atzo goizean.

Izan ere, egun hartan burdinazko hesia gainditu eta bertan eutsita protesta egiten ari ziren bost lagun atxilo eraman zituzten. Horietako bat, Txetx Etxeberri, «eskuak atzean loturik lurrean zeukatela eta kameretatik kanpo polizi batek» eman zion «jipoia» salatu zuen Barth Camedescasse Bizi! mugimenduko bere kideak. Kolpeen ondorioz, bi egun bajan izan dela ere gaineratu zuen.

Kolektiboak harriduraz eta biziki haserre hartu ditu Catherine Seguin suprefetak egunkari bati egindako adierazpenak, non «biktima bat izatekotan, hori ni neu naiz» esan zuen. Hitzok are eta salagarriagoak iruditzen zaizkio «hiri askotan Polizia indarkeria gero eta maizago eta bortitzago» erabiltzen ari denean.

Gobernuak gai honetan «iritzi publikoa nabarmen kontra» duela uste du: «Horregatik beldurra, eta manipulazioa erabiltzen du eta oinarrizko eskubideen kontra, –manifestatzekoa, kasu– egiten du».

Larunbatean Iparlan istripuz zendutako beren kide Claude Larrieu gogora ekarrita, «borrokan segituko» dutela azpimarratu zuten, gaur Baionako mobilizaziora deituz. A.M.